Oscuras y agradables (TEATRAL.COM.UY)
TEATRAL.COM.UY, 24 de Noviembre de 2012 | Escrito por Anabella Aparicio | Fotos: Anabella Aparicio
Oscuras y agradables
Amapolas, una obra escrita y dirigida por Luis Izzi, se presenta en el Teatro del Museo Torres García. Teatral conversó con su director para conocer mejor su trabajo
Una hermana sobreprotectora, otra alcohólica, y la más pequeña, intelectual. Estas tres mujeres comparten el día a día en una casa donde muchos secretos permanecen encerrados, al igual que ellas.
La obra creada por el director Luis Izzi, trata de tocar los puntos más sombríos y a veces más visibles de nuestra sociedad, los que muchas veces permanecen ocultos a la percepción de la gente.
Abandono, abuso, alcoholismo y rupturas son elementos que están fuertemente presentes en esta obra, que dura unos 50 minutos, y lleva al espectador a reflexionar sobre estas realidades que muchas veces pueden estar más cerca de lo que uno se imagina.
Estas tres jóvenes (Natalia Carrau, Sofía Ott y Érica Gómez Ricci), rememoran a lo largo de la obra cómo su vida era tan perfecta y feliz, y cómo un incidente generó, de un momento a otro, que su vida diera un giro de 180 grados.
La capacidad de lidiar con los cambios abruptos, de aceptar el abandono materno, las preguntas constantes sin respuesta, y un violín que acompasa el dolor y la reflexión que cada una de las hermanas lleva en su interior, son expuestos desde la mirada de cada actriz.
Como todo grupo de hermanas, no faltan las peleas y la búsqueda de responsables, aunque nunca rompen la unidad y la compañía confidente que hay entre ellas.
¿Qué te inspiró a crear la obra?
La obra surge de la investigación. Quería trabajar el concepto del “punto de vista”. Es decir, cuando ocurre algo, un hecho puntual, la forma en que impacta en las personas depende de cada uno. Por ejemplo, en la obra se habla de un hecho puntual, el cual es contado y vivido por tres personajes. Estos personajes lo tiñen de experiencias personales y de percepciones totalmente individuales. Fue así que nació la idea de Amapolas, ¿cómo vivo y cuento mi experiencia? Luego estos tres puntos de vista se mezclan. La intención es que el espectador también logre su punto de vista, individual y diferente, o no.
¿Hay un poco de reflejo de la familia uruguaya en el contenido de la obra?
El reflejo en la vida cotidiana es inevitable, no sé si se busca, pero la realidad es que tratamos de dotar de una neutralidad al texto, y a la vez hacerlo cercano. Es así que Amapolas puede reflejar una familia uruguaya o de otro lugar; muchos de los conflictos y relaciones se repiten en diferentes lugares, va más allá de las fronteras y de la cultura.
¿Por qué Amapolas?
Las amapolas tienen un valor simbólico para nosotros y para la obra, son "oscuras y agradables". Los personajes esconden algo oscuro, que poco a poco vamos develando. También la obra maneja el tema del tiempo como motor; por momentos se enlentece, y por momentos se acelera, va y viene. Eso creo que está bien resumido en el título Amapolas; la fragilidad de unas flores muy delicadas para estas zonas, merecen un cuidado especial.
En la obra se tocan temas que hoy afectan fuertemente a la sociedad, como el abuso, el alcoholismo, el abandono materno; ¿que buscás generar en el público?
La obra trata muchos temas, entre ellos el abandono, que es de los conceptos más fuertes. Más allá del abandono materno que puede ser claro, hay otros abandonos, incluso el de uno mismo. El tema del abuso también es un tema que ha estado en nuestras obras anteriores y seguirá estando. Podría decir que al tratar estos temas estamos buscando generar conciencia, y es verdad, pero no es algo que nos ponemos como objetivo principal. Creo que nuestro objetivo es expresarnos por medio del arte, es lo que buscamos. Y seguramente muchos de estos temas son de nuestra inquietud, y nos interesa abordarlos con otros puntos de vista, contarlos y mostrarlos desde nuestra perspectiva para que el espectador encuentre el suyo propio.
teatral.com.uy/web/index.php?option=com_content&view=article&id=186%3Aoscuras-y-agradables&catid=4&Itemid=6
Oscuras y agradables
Amapolas, una obra escrita y dirigida por Luis Izzi, se presenta en el Teatro del Museo Torres García. Teatral conversó con su director para conocer mejor su trabajo
Una hermana sobreprotectora, otra alcohólica, y la más pequeña, intelectual. Estas tres mujeres comparten el día a día en una casa donde muchos secretos permanecen encerrados, al igual que ellas.La obra creada por el director Luis Izzi, trata de tocar los puntos más sombríos y a veces más visibles de nuestra sociedad, los que muchas veces permanecen ocultos a la percepción de la gente.
Abandono, abuso, alcoholismo y rupturas son elementos que están fuertemente presentes en esta obra, que dura unos 50 minutos, y lleva al espectador a reflexionar sobre estas realidades que muchas veces pueden estar más cerca de lo que uno se imagina.
Estas tres jóvenes (Natalia Carrau, Sofía Ott y Érica Gómez Ricci), rememoran a lo largo de la obra cómo su vida era tan perfecta y feliz, y cómo un incidente generó, de un momento a otro, que su vida diera un giro de 180 grados.
La capacidad de lidiar con los cambios abruptos, de aceptar el abandono materno, las preguntas constantes sin respuesta, y un violín que acompasa el dolor y la reflexión que cada una de las hermanas lleva en su interior, son expuestos desde la mirada de cada actriz.
Como todo grupo de hermanas, no faltan las peleas y la búsqueda de responsables, aunque nunca rompen la unidad y la compañía confidente que hay entre ellas.
¿Qué te inspiró a crear la obra?
La obra surge de la investigación. Quería trabajar el concepto del “punto de vista”. Es decir, cuando ocurre algo, un hecho puntual, la forma en que impacta en las personas depende de cada uno. Por ejemplo, en la obra se habla de un hecho puntual, el cual es contado y vivido por tres personajes. Estos personajes lo tiñen de experiencias personales y de percepciones totalmente individuales. Fue así que nació la idea de Amapolas, ¿cómo vivo y cuento mi experiencia? Luego estos tres puntos de vista se mezclan. La intención es que el espectador también logre su punto de vista, individual y diferente, o no.
¿Hay un poco de reflejo de la familia uruguaya en el contenido de la obra?
El reflejo en la vida cotidiana es inevitable, no sé si se busca, pero la realidad es que tratamos de dotar de una neutralidad al texto, y a la vez hacerlo cercano. Es así que Amapolas puede reflejar una familia uruguaya o de otro lugar; muchos de los conflictos y relaciones se repiten en diferentes lugares, va más allá de las fronteras y de la cultura.
¿Por qué Amapolas?
Las amapolas tienen un valor simbólico para nosotros y para la obra, son "oscuras y agradables". Los personajes esconden algo oscuro, que poco a poco vamos develando. También la obra maneja el tema del tiempo como motor; por momentos se enlentece, y por momentos se acelera, va y viene. Eso creo que está bien resumido en el título Amapolas; la fragilidad de unas flores muy delicadas para estas zonas, merecen un cuidado especial.
En la obra se tocan temas que hoy afectan fuertemente a la sociedad, como el abuso, el alcoholismo, el abandono materno; ¿que buscás generar en el público?
La obra trata muchos temas, entre ellos el abandono, que es de los conceptos más fuertes. Más allá del abandono materno que puede ser claro, hay otros abandonos, incluso el de uno mismo. El tema del abuso también es un tema que ha estado en nuestras obras anteriores y seguirá estando. Podría decir que al tratar estos temas estamos buscando generar conciencia, y es verdad, pero no es algo que nos ponemos como objetivo principal. Creo que nuestro objetivo es expresarnos por medio del arte, es lo que buscamos. Y seguramente muchos de estos temas son de nuestra inquietud, y nos interesa abordarlos con otros puntos de vista, contarlos y mostrarlos desde nuestra perspectiva para que el espectador encuentre el suyo propio.
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